Aproximadamente el 6% del Producto Interno Bruto (PIB) brasileño y el 11,79% de los ingresos de las familias estaban comprometidos con el pago de intereses en el primer semestre de 2021, según un estudio de la Federación de Comercio de Bienes, Servicios y Turismo del Estado de São Paulo (FecomercioSP). En este periodo, la cifra fue de US$ 43,1 mil millones. En términos comparativos, equivale al 73% de los recursos inyectados a través de la ayuda de emergencia pagada el año pasado a quienes perdieron sus ingresos o empleos durante la pandemia.
Altamiro Carvalho, asesor económico de la federación, ha dicho esta semana que, después del alquiler, el gasto en intereses es la segunda partida entre los mayores gastos de los brasileños. “Los intereses se insertan en los gastos de manera que la gente no se da cuenta del volumen que representa este recurso en el presupuesto nacional”, dijo. El gasto en intereses supera, por ejemplo, los gastos totales, por año, en educación, servicios y ropas.
El análisis también señala que “el pago de emergencia hecho por el gobierno federal, que podría incentivar aún más el consumo de las familias, beneficiando a otros sectores de la economía de forma homogénea, quedó bastante comprometido con el pago de estas tasas, canalizadas por el sistema financiero”.
El estudio cuantifica el volumen destinado al pago de los intereses de los préstamos obtenidos en operaciones de crédito libre en los primeros seis meses de 2019, 2020 y 2021.
“Si no se hubiera pagado la mitad de esa cifra, se inyectarían en la economía recursos para el consumo de las familias, se darían condiciones para el consumo, de una manera muy impactante, la cual podría, obviamente, estimular la producción. Se destinaría a la industria, mejoraría el nivel de actividad económica en su conjunto”, destacó Carvalho. El pago de intereses, a su vez, se destina a las instituciones financieras y regresa al mercado también en forma de intereses.
Liquidación
Respecto a las personas jurídicas, el estudio indica que las empresas utilizaron US$ 16,6 mil millones para el pago de intereses. El importe es un 8,2% superior al registrado en 2020 y representa el 2% del PIB semestral. El Programa Nacional de Apoyo a las Micro y Pequeñas Empresas (Pronampe), por ejemplo, liberó US$ 6,9 mil millones en recursos para más de 500 mil empresas en 2020. En este sentido, los intereses pagados por las personas jurídicas en el primer semestre de este año fue casi 2,5 veces superior al volumen destinado por el programa.
FecomercioSP también señala que la morosidad entre las familias está bajo control. El valor de los préstamos con más de 90 días de retraso cayó un 14,4% en el primer semestre de 2021, situándose en US$ 10 mil millones. La tasa de impago fue del 4,8% en el primer semestre de 2019, del 5,3% en 2020 y se situó en el 4,1% de enero a junio de 2021.
Respecto al crédito, considerando el periodo analizado, “tanto las concesiones como el saldo de las operaciones de crédito para personas jurídicas avanzaron, en la comparación anual, un 1,2% y un 5,1%, respectivamente", señala la federación en una nota.
“El crédito en Brasil supone un alto coste tanto para los hogares como para las empresas, ya que se lleva casi el 8% del PIB de la sociedad cada seis meses, en forma de pago de intereses.” La entidad cree que el desequilibrio de las cuentas públicas es el principal factor que explica los altos tipos de interés.
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