El gobierno federal ha autorizado a extranjeros de cualquier nacionalidad a ingresar por todos los aeropuertos de Brasil. La medida entró en vigor el jueves (24) y también extiende, por 30 días, la restricción a la entrada de extranjeros “por carreteras, otros medios terrestres o por transporte acuático”.
En julio, el gobierno ya había liberado parcialmente la entrada de extranjeros por vía aérea, manteniendo la restricción en los aeropuertos de Mato Grosso do Sul, Paraíba, Rondônia, Rio Grande do Sul y Tocantins. El mes pasado, la restricción abarcaba los aeropuertos de los estados de Goiás, Mato Grosso do Sul, Rio Grande do Sul, Rondônia, Roraima y Tocantins.
Desde que en marzo se restringieron los vuelos internacionales y el ingreso de no brasileños por otras vías, debido a la pandemia del covid-19, el gobierno viene evaluando mes a mes las medidas que deben mantenerse.
Se permite el ingreso a extranjeros por vía aérea siempre que se cumplan los requisitos migratorios adecuados a su condición, incluido el visado cuando sea requerido. Quienes viajan a Brasil para un periodo corto, de hasta 90 días, deben presentar a la aerolínea, antes de embarcar, comprobante de compra de seguro para gastos de salud válido en Brasil.
La ordenanza conjunta suscrita por la Casa Civil y por los ministerios de Salud, Infraestructura, Justicia y Seguridad Pública autoriza, excepcionalmente, al extranjero que se encuentra en un país de frontera terrestre con Brasil y necesita cruzarlo para abordar un vuelo de regreso a su país de residencia, ingresar con autorización de la Policía Federal e ir directamente al aeropuerto. Para ello, debe presentar una demanda oficial de la embajada o consulado de su país y los boletos de avión correspondientes.
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