El número de muertes por el nuevo coronavirus ha aumentado a 1.532 en el país, y el de casos ha subido a 25.262. El nuevo total fue publicado por el Ministerio de Salud durante una conferencia de prensa en Palacio de Planalto el martes (14) y registra que el número de muertes casi duplicó en 24 horas: 204. El lunes se habían registrado 105 óbitos, y el domingo, 99.
En la entrevista, también se presentaron por primera vez datos sobre personas curadas. Según el Ministerio, la tasa es del 55% de los casos confirmados, es decir, un total de 14.026 pacientes.
El informe también registra que el número total de fallecimientos aumentó en un 15% en comparación con el lunes (13), cuando sumaban 1.328. Entre los 27 estados brasileños, São Paulo tiene el mayor número de muertes (695). Los siguientes son Río de Janeiro (224), Pernambuco (115), Ceará (107) y Amazonas (90). La tasa de letalidad en el país es del 6,1%.
Respecto al perfil de las víctimas, el 59,9% eran hombres y el 40,1%, mujeres. Del total, el 73% tenía más de 60 años y el mismo porcentaje tenía algún factor de riesgo, como enfermedad cardíaca, neumopatía, diabetes y enfermedades neurológicas.
Las hospitalizaciones por COVID-19 totalizaron 4.926. Sin embargo, hay 31.605 personas hospitalizadas con Síndrome Respiratorio Agudo Severo (SRAS) bajo investigación, que dependen de pruebas para confirmarse o no como casos de infección por el nuevo coronavirus.
Pruebas y equipamientos
Durante la conferencia de prensa, el ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, informó que se hizo una convocatoria para formar un grupo de laboratorios que producirían las pruebas RT-PCR de manera centralizada y coordinada en São Paulo y las distribuirían a otros lugares. La intención es producir 3 millones de pruebas, al menos 30 mil por día.
Cuando se le preguntó sobre el hecho de que otros países tienen tasas de prueba proporcionalmente más altas, Mandetta argumentó que Brasil adoptó esta estrategia al mismo tiempo que Europa y Estados Unidos. “Sin embargo, en un país con población más pequeña, se pueden hacer más pruebas”, justificó refiriéndose a naciones europeas.
El ministro mencionó la posibilidad de permitir la venta de pruebas rápidas en farmacias. “Vamos a estandarizar para que las farmacias puedan hacerlo. Tenemos diferentes herramientas para aumentar este tipo de información, importante para la toma de decisiones”, comentó.
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