El futuro ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo, afirmó que la política exterior del próximo gobierno va a incentivar las negociaciones para ampliar el comercio y el agronegocio de forma “activa y sistemática”. Las declaraciones fueron dadas a través de su cuenta en Twitter este viernes (12).
Araújo agregó que el objetivo es construir un nuevo momento para el país. “La pujanza agrícola será parte del proyecto de engrandecimiento de Brasil. Al mismo tiempo, la proyección de un país confiado, grande y fuerte servirá aún más a los intereses de la agricultura.”
Sin antagonismos
En la serie de tuítes, Araújo condena el discurso sobre el antagonismo entre los incentivos al agronegocio y la preservación ambiental. Según él, los ministerios de Relaciones Exteriores y de Agricultura trabajarán juntos.
“¿Quieren poner la agricultura contra los ideales del pueblo brasileño? No lo conseguirán. El trabajo incansable, la fe, la inventiva y el patriotismo de los agricultores son la esencia misma de la brasilidad.”
Araújo añadió que el gobierno brasileño va a defender al productor rural y no ponerlo como adversario del medio ambiente. “Defenderemos al productor brasileño, en los foros internacionales, de la dicha completamente falsa de ser agresor del medio ambiente. El productor agrícola brasileño contribuye a la preservación ambiental como en ningún otro lugar del mundo.”
Orientaciones
El futuro canciller afirmó también que creará un Departamento del Agronegocio en el MRE para trabajar junto al Ministerio de Agricultura en la conquista de mercados internacionales. “Daremos al agro la atención que nunca tuvo.”
Las representaciones de Brasil en el exterior también darán más atención al agronegocio. “Orientaremos a las embajadas a promover los productos agrícolas brasileños activa y sistemáticamente”. La Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversión (Apex), según él, seguirá la misma directriz.
Identificación
De acuerdo con Araújo, hay una identificación entre el medio rural y las propuestas del gobierno del presidente electo, Jair Bolsonaro. “El sector productivo agrícola se identifica profundamente con los valores de la nación y los defiende, tanto que ha apoyado y apoya fuertemente a Bolsonaro. Sin embargo, el establishment de la vieja política y de los viejos medios quiere usar el agro como pretexto para reducir a Brasil a un país insignificante.”
Según Araújo, en los últimos gobiernos no se han firmado acuerdos comerciales relevantes. “En esos largos años sin ideales y sin identidad, no firmamos cualquier acuerdo comercial relevante. Eso muestra que no es por la autonegación o por la adhesión automática a los cánones del globalismo que Brasil conquistará mercados, sino por la autoconfianza y por el trabajo.”
Araújo llamó “nueva” a la política exterior del futuro gobierno y dijo que Brasil no dejará de exportar pollo, soja, carne y azúcar, pero pasará a exportar también esperanza y libertad. “El hecho de que somos una potencia agrícola no nos prohíbe de tener ideales y de luchar por ellos”, dijo.
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